Nadie tiene poder sobre mi. Ningún hombre. Ningún Dios. Ningun Príncipe. ¿Qué derecho da la edad para aquellos que son inmortales?. ¿Qué derecho dá el poder para aquellos que vencen a la muerte? Convoca tu condenada cazería. Veremos a quién me llevo gritando al infierno conmigo...